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MALAS NOTICIAS PARA COVIRAN GRANADA.

El alero catalán se resiente en un entrenamiento y el club le diagnostica una alteración morfológica del ligamento cruzado anterior que puede hacerle perder lo que resta de temporada y pasar por el quirófano.

Joan Pardina volvió a sentir dolor en su rodilla derecha en el entrenamiento efectuado el pasado lunes en el Palacio de Deportes. El alero notó una sensación de bloqueo articular después de un mes de recuperación y de evolución favorable Ayer se le realizó una resonancia magnética que mostró buena evolución en cuanto al edema óseo, pero se advierte una alteración morfológica del ligamento cruzado anterior, sugerente de rotura parcial severa completa de posible evolución subaguda-crónica posterior al primer traumatismo.

Una lesión que no se había objetivado en las dos resonancias magnéticas realizadas con anterioridad. Queda pendiente de valoración por cirujano traumatólogo, ya que con este tipo de lesión posiblemente se pierda el resto de la temporada porque la solución puede ser quirúrgica.