JOSEBA AGUADO Y DAVID TENORIO NO SEGUIRÁN EN EL ‘B’ LA PRÓXIMA CAMPAÑA.
TRAS UNA REUNIÓN CON EL DIRECTOR DEPORTIVO ROJIBLANCO, LO QUE PARECÍA UNA RENOVACIÓN SEGURA, SE HA TRANSFORMADO EN UN SALIDA INESPERADA.
El técnico Joseba Aguado no seguirá como entrenador del Granada B, conjunto que milita en el grupo IV de Segunda B, tras cinco temporadas en el cargo, en las que consiguió dos ascensos y con el cual esta temporada se ha quedado en quinta posición a las puertas de entrar en la fase de ascenso a Segunda División A.
El director deportivo del Granada CF, Juan Carlos Cordero, y el propio Aguado han «acordado» la salida del técnico granadino del filial rojiblanco en una reunión mantenida esta mañana, según ha confirmado la entidad.
«Queremos dar un cambio generacional al filial, tanto en plantilla como en cuerpo técnico, para el próximo curso, apostando por jugadores más jóvenes que puedan ayudar al primer equipo», ha explicado Cordero.
El dirigente ha destacado que Aguado entendió «desde el primer momento la filosofía del club y ha llevado al filial a lo más alto en estas cinco temporadas» incidiendo en que su profesionalidad y la de su segundo entrenador, David Tenorio, «han hecho que el Granada B se haya consolidado como uno de los equipos fuertes del Grupo IV de Segunda División B».
«Les auguro un gran futuro como entrenadores ya que en nuestro club solo tenemos palabras de agradecimiento al trabajo realizado», ha añadido Cordero, quien ha resaltado los «cinco exitosos años» en los que el granadino ha estado dirigiendo la plantilla del filial.
Aguado llegó al Granada B hace cinco temporadas, cuando el equipo militaba en Primera División Andaluza, logrando en su primer ejercicio la permanencia en la categoría y en los dos siguientes dos ascensos consecutivos hasta llevar al equipo a Segunda B.
En la campaña recién finalizada, el filial se ha quedado a las puertas de disputar la promoción de ascenso a Segunda, al haber finalizado la Liga en la quinta plaza, y tanto Aguado como Tenorio tuvieron la oportunidad de dirigir un partido del primer equipo rojiblanco en la Liga BBVA tras la destitución del técnico Joaquín Caparrós.
