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UN DOLORIDO DAVID VALERO SUFRE EN EL MUNDIAL DE XCO DE LENZERHEIDE.

EL BIKER BASTETANO ACABÓ EN EL PUESTO 51 UN PRUEBA QUE AFRONTABA CON ILUSIÓN PERO EN LA QUE UNA CAÍDA EL DÍA ANTERIOR LE MERMÓ FÍSICAMENTE. EL GANADOR FUE EL SUIZO NINO SCHURTER. 

Las pruebas de los Élite cerraban hoy el Mundial de XCO de Lenzerheide, en el que todavía mañana habrá representación española en las pruebas de Descenso. No han podido pelear por las medallas los corredores de la Selección Española, que han contado con Carlos Coloma como mejor exponente, 18º tras arrancar muy atrás y tener que remontar numerosas posiciones.

Arrancaba desde la primera línea David Valero merced a su buena clasificación UCI; un emplazamiento que le permitió rodar durante los primeros compases de la carrera en las posiciones de privilegio, bajo la estela del máximo favorito, el actual y seis veces campeón Nino Schurter, que hizo vibrar a su público durante las ocho vueltas para volver a vestir el maillot arcoíris.

Pronto se pudo comprobar que la condición de David Valero, acostumbrado a pelear con los mejores en la Copa del Mundo y bronce en el Europeo, no era la mejor. El andaluz tuvo una caída el día previo a la carrera que hizo que se resintiera de su clavícula fracturada el pasado mes de enero.

Fue perdiendo poco a poco posiciones Valero, que pudo completar la carrera haciendo un gran esfuerzo, finalizando en la posición 51.

Contento con las sensaciones después del percance de ayer. Se ha podido acabar la carrera y conseguir puntos. He defendido los colores de España lo mejor que he podido”, comentaba al finalizar la carrera Valero. “Esperamos volver en 2019 con más fuerza y con ganas de revancha”, concluía el siempre ambicioso corredor andaluz.

Sergio Mantecón llegaba en gran estado de forma a la cita, ambicionando pelear con los mejores, pero su retrasada salida y sus problemas de alergia han impedido sobresalir al gran biker cántabro. Mantecón fue capaz de completar la segunda vuelta rodando en el puesto 21, perdiendo fuelle a medida que avanzaba la carrera hasta terminar 32º.

“Por desgracia no ha salido como esperábamos. Siempre en esta época las alergias me causan malas jugadas. Dentro de las circunstancias tengo que estar satisfecho porque lo he dado todo, aunque decepcionado porque venía bien de forma”, señalaba el cántabro, que competirá la semana próxima en el Campeonato del Mundo de XC Maratón.

La mejor actuación de rojo y amarillo la completó el más veterano del trío; un Carlos Coloma que a pesar de partir muy retrasado, demostró un gran estado de forma, adelantando a una ingente cantidad de rivales en el segundo giro hasta colocarse 18º, una posición de la que apenas se movería de ahí al final, rodando a buen ritmo, pero lastrado por una primera vuelta en la que los atascos le impidieron conectar con los mejores de la cita.

“Salí con el dorsal 27 muy lastrado, hice una buena remontada y mantuve el puesto 18, que es una buena posición, pero el objetivo era estar entre los 8 primeros. El año que viene prometemos más batalla”, señalaba Coloma, incansable, que va a por su Mundial número 21.

Se cumplieron los pronósticos con el suizo Nino Schurter, que comandó la carrera de inicio en solitario, viajando a partir de la tercera vuelta con el italiano Gerhard Kerschbaumer, al que soltaría en el último giro tras un potente ataque que le permitió celebrar su entrada en meta con tiempo, vitoreado por sus compatriotas y degustando las mieles de un nuevo éxito, su séptimo título mundial. “Este título en casa es muy especial para mí, quizá el más importante”, aseguraba al final de la carrera el laureado biker.

Plata sería el italiano Kerschbaumer a 11 segundos, amenazado en algún tramo de carrera por el polifacético holandés Mathieu Van der Poel, que llegó a colocarse 12 segundos del dúo de cabeza al final de la tercera vuelta, perdiendo fuelle algo después ante el gran ritmo que imponían el suizo y el italiano. Van der Poel volvió a dejar muestras de un talento, capaz de brillar en el ciclocross, en el MTB o en la carretera.

 

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