TRIBUNA ALTA: «EL GRANADA ALEJA FANTASMAS», POR PABLO DOMÍNGUEZ
Hay quien persiste en su empeño de buscarle lagunas al Granada, obcecándose en sacar a relucir las carencias de un equipo que aún está ensamblándose. No en vano, la temporada oficial acaba de arrancar y el plantel todavía tiene que pulir detalles del sistema y modo de encarar los encuentros que pretende implantar Caparrós. Cuando un proyecto se erige desde la nada lo natural es apreciar más los brotes verdes que las dificultades a las que el propio vestuario ha demostrado ser capaz de sobreponerse.
El encuentro arrancó con embestidas del Granada y llegadas del Deportivo. Las ocasiones más claras fueron rojiblancas, sin embargo serían los gallegos quienes se adelantarían en la primera mitad merced a su única ocasión durante el primer acto. Un error de marca de la zaga local encadenado con otro de Dimitrievski propició que Cavaleiro no perdonara. A partir de ahí los de Víctor Fernández se limitaron a defender el resultado mientras los nuestros lo intentaban una y otra vez.
Los Cármenes tenía ganas de disfrutar de su equipo y se quedó un tanto frío con el tanto visitante. Sin embargo, tras el descanso la dinámica cambió por completo y los de Caparrós pasaron literalmente por encima del conjunto de Riazor. El Granada fue capaz de sobreponerse a la maraña defensiva que dispuso el Deportivo con insistencia, coraje, calidad y oportunismo. Desde el inicio de la segunda mitad el único objetivo fue la portería de Germán Lux. Finalmente Rochina, gracias a una pantalla de El-Arabi fusiló desde larga distancia para empatar el encuentro y minutos después Babín peinó un servicio de Fran Rico a balón parado desde el costado zurdo para voltear definitivamente el resultado. La alegría en Los Cármenes era doble: se ganaba el partido y con ello se alejaban los fantasmas de la aciaga temporada pasada como local.
Si por algo se caracteriza el técnico utrerano es por explotar todo el potencial que atesoran sus futbolistas y, a su vez, hacer que éstos conformen un bloque correoso y eficiente para sus rivales. Esto ha hecho dar un paso adelante al Granada con respecto a temporadas anteriores tratando de llevar el peso de los partidos. Se vence y se convence desde el primer momento. Además todos los fichajes están aportando y sumando. El aroma de este plantel incita a la ilusión, lo que por otra parte respalda el trabajo para la incorporación de las caras nuevas.
Ideal apuntaba que las cuatro principales incorporaciones que buscaba Pina eran John Córdoba, Aderlan Santos, Khazri y Van Aanholt. De ellos, solamente el primero acabó recalando en la entidad. En cambio, son otros los jugadores que están dejando interesantes destellos de calidad: Ortuño, Rochina, Babín, El-Arabi y Fran Rico completaron un excepcional choque, siendo los artífices de la remontada. La mejor noticia de la noche. El Granada está demostrando ser un equipo guerrero que no se amilana por contratiempos y capacitado para superarlos. Incluso disfrutamos durante varias horas el privilegio de ser líderes de Primera División. Temporada nueva, vida nueva.
Ilusión intacta y feliz arranque de campeonato. Siguiente parada: el Martínez Valero de Elche.
